SIETEVIDASTIENEELGATO

REPORTERO SORPRENDIDO Y REQUERIDO

Ayer se celebraba el Día de la Independencia de Pakistán. En la Plaça del Àngels de Barcelona, barrio del raval también conocido como Ravalistán, varios cientos de pakistanís asistian a los actos de conmemoración. De esos varios cientos, sólo tres mujeres espectadoras y algunas niñas. El resto, hombres y niños. La ceremonia se inició con Els Segadors, himno de Catalunya y continuó con canciones interpretadas por infantes pakistanís. A continuación varios parlamentos en urdu, agradecimientos a los patrocinadores del evento, entre ellos el Ajuntament y La Caixa.

Este reportero, aburrido de no entender nada de lo que se decía, se dedicó a recorrer la plaza en busca de instantáneas para ofrecerlas a sus lectores. Mientras intentaba fotografiar a un skater pelao de lo más mono (sí, ya sé que ese no era el trabajo encomendado, pero es tan lindo...:-)), ve que se dirige hacia él un hombre del país que celebraba su independencia, con mala cara, cara de enfado, de intoxicado, y le dice que no fotos, no quiero que tú fotos. A lo que el tribulete responde que para nada le estaba sacando fotos. Los problemas de lengua y el estado del individuo enfadado hacen que sea necesaria la intervención de un amigo suyo, mucho más consciente y dialogante, que explica al reportero que el amigo acaba de salir del trullo porque lo denunciaron unos moros (sic) y que no queria que le hicieran fotografías. A lo mejor se pensaba que el periodista era un pasma disfrazado.
El enfadado obliga al fotógrafo a enseñarle las fotos que tenía en la cámara con muy malos modos. Como su estado visual no era de lo más claro, es el amigo quien se ocupa de examinar las instantáneas.

Afortunadamente sólo había cuatro fotos en la cámara, porque quería verlas todas. Finalmente, el asunto queda a gusto de los exigentes ciudadanos que practicaban el botellón y el liamiento de tabaco perfumado en la vía pública, ambas acciones penalizadas por la Ordenanza de Civismo vigente en la ciudad, y el fotógrafo puede dedicarse a desarrollar su labor sin más traspieses. La cosa quedó en nomás que un trompicón informativo.
La fiesta continuó hasta entrada la noche, con actuaciones de cantantes y otras atracciones. Pero de eso se pueden informar en otros medios ya que nuestro reportero se dedicó a los skaters, que ofrecían otra cara y otro body de la actualidad. Por cierto, que patinar también está penalizado por la Ordenanza de Civismo.

Para Sietevidastienelgato, informó Shysh Tribulator