Empecé a escribir esta historia pensando en que podría darle una continuidad. Pero como me pasa muchas veces, me cansé de las cosas que tardan en verse acabadas. Y se ha quedado en tres capitulillos, de los cuales hoy ofrezco el primero.
UNO
Lucy se casó muy joven. De hecho aún tenía muñecas en su habitación cuando dijo de casarse. Había conocido a Angelito una noche en las fiestas de su barrio. Lucy era una chica con encanto sensual, poco habladora por entonces, rellenita y hermosota. Angelito era pequeño y enjuto, con una cara seca de ojos grandes y negros, francos. Lucy no había tenido novio todavía y Angelito le atrajo por su pequeña estatura y su sencilla complexión. Le hacía reír con sus chistes, sus gracias y sus salidas de tono. Aquella primera noche bebieron y bailaron, charlaron y se besaron en medio del jaleo, la multitud y los pasodobles. Follaron bajo las ramas de un abeto. Las agujas del árbol que había en el suelo se clavaban en la espalda de Lucy y en las manos de Angelito. Las manos y los brazos de Lucy apretaban el delgado cuerpo de Angelito que se sentía en la gloria con la mullida carne que le acogía.
Se vieron un día sí y otro también durante dos semanas. Una tarde Lucy le dijo a Angelito que no le había venido la regla. Angelito se acojonó al principio pero luego dijo que podía ser un retraso.
Una semana más tarde la regla seguía sin venir y ambos decidieron que lo mejor era casarse. Arreglar papeles mientras Lucy y su piel cada día más espléndida intentaban ocultar cualquier signo de embarazo a los ojos de su madre.
Una tarde de sábado, Angelito fue de visita a casa de Lucy y juntos contaron a los padres de ella los planes para la boda. Las manos de los padres de Lucy se alzaron al cielo, junto con los gritos y el aliento a gazpacho que salían de sus bocas.
Vosotros dos estáis locos, pero de dónde habéis sacado esa idea…Papa es que estoy…No me digas que estás… Sí mama, estoy…Esta hija mía es tonta. ¿De qué vais a vivir?... Habíamos pensado vivir aquí con vosotros hasta que encontremos trabajo y podamos coger una casa… ¿Trabajo? ¿Y de qué vas a trabajar tú? Si eres una inútil, si no tienes graduado ni sabes hacer la o con un canuto. Follar es lo único que sabes…Te juro papa que ha sido la primera vez…Pues vaya suerte hija, podrías haber comprado lotería…
Angelito miraba a uno, a otra y a la chica que llevaba a su criatura en el vientre. No dijo ni una palabra más hasta el hasta mañana que pronunció antes de cerrar la puerta. Lucy se quedaba a solas con sus padres intentando convencerla de la locura que se proponía hacer.
El domingo a mediodía Angelito se presentó en casa de los padres de Lucy para decirles que había encontrado trabajo de mantenimiento en los caballitos que había en el límite del barrio, casi en la mejor zona de la ciudad. Lucy se puso muy contenta. Sus padres no mostraron ni la más mínima de las alegrías.
A pesar de los padres, Lucy y Angelito siguieron con los preparativos de su boda. No pensaban hacer una gran celebración.
Juntaremos a mis padres, mis tíos, Eva la vecina y su nieta, pobrecitas que nunca van a ningún sitio. Y de tu familia a quien tú quieras… Yo sólo tengo un tío que vive en Guadalajara y no sé ni su dirección. Como no invite a Joan el del bar y a los colegas de los caballitos, no sé a quién más podría decírselo. Además lo importante es que tú y yo vamos a estar juntos para siempre y con nuestro niño…O niña, a mí me gustaría más una niña…O niña, lo que tú digas mi gordita…Te dije que no me llamaras gordita…Pero si a mí me encantas así. Mmmm, que ganas tengo de estar contigo juntitos en una cama…Pues esta tarde mis padres van a ver una zarzuela en el Centre Moral…Pues esta tarde te voy a poner contenta, que tengo unas ganas…
3 comentarios:
Jo, con el amor y los orificios condonianos... me he quedado seco... necesito leer más :)
Un abrazo enorme Shysh ;)
Aguardo mas lineas...
un abrazo y hasta pronto.
mas mas porfa
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