15/5/07

CARTA DE SERVIDOR PUBLICADA EN EL PAÍS.

El texto íntegro:

La Barcelona que yo vivo.

Interesantes las visiones de los barceloneses con nombre en la edición del domingo. Me gustaría añadir, como ciudadano que vive en el centro, que Barcelona es cada vez menos nuestra. Me explico: vistas las hordas de turistas que visitan solamente algunas zonas, visto que los establecimientos cada día están más dirigidos hacia el consumo de esos turistas, no nos queda a los barceloneses de las zonas invadidas más que el refugio en algunos rincones que aún no han sido colonizados por los visitantes. Paseen cualquier día por la Rambla y dedíquense a encontrar paseantes autóctonos. Intenten comprar en la Boquería y no les quedará más remedio que pelear por el espacio contra gente embobada que come bandejitas de fruta mientras fotografía los productos como si nunca los hubiera visto. Intenten decirles a esos extasiados que usted está allí para satisfacer una necesidad, no como visitante del Parque Temático Disneylona. Intenten circular con esas bicicletas tan cacareadas sorteando a los de nuevo embobados turistas que no reconocen la llamada de paso del timbre de una bici. Intenten tomar algo en una cafetería normal, de las de toda la vida y quizás la encuentren. Intenten no preguntarse todos los días qué ganamos los barceloneses con el incremento del turismo. Intenten no pensar, como dice Sergi Pàmies que "produce cierto rubor ver el entusiasmo que se invierte en atraer al turista conociendo la ineficacia o pasividad con la que, en ocasiones, se atienden las quejas de los nativos". Intenten para finalizar no sentirse extraños en su propia ciudad.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Estuve en Barcelona a finales del pasado septiembre y es verdad, lo que más vi por la calle fue turistas. Iba a los museos y lugares de interés y sólo oía hablar en inglés, francés, alemán, italiano. Hasta me hicieron ilusión las pocas veces que algún dependiente se dirigió a mí en catalán. Pero yo creo que pasa lo mismo en todas las grandes ciudades... en Madrid, menos madrileños, hay de todo!! Habrá que acostumbrarse.

Un beso!

Ruvias Intelijentes dijo...

pero que vien tesplicas, conyo!!!!
guapo, mas que guapo!!!!

ainssssss

(ganas mas locas de aplaudir nos an dao, che)

Anónimo dijo...

Una era construye ciudades. Una hora las destruye...
Hay muchos rincones del mundo que han sucumbido a los efectos de la globalización perdiendo su aura singular y personalidad; tras New York, y Rio de Janeiro, BCN ha sido elegida la tercera ciudad mas "atractiva" del mundo para escaparse una temporada. Espero que BCN como joya mundial nunca pierda su arraigo y su especial identidad...
Abrazos.

Anónimo dijo...

Ay cari que listo eres para tu edad... jajaj! Fue en El Pais edicion nacional o de Cataluña? pq no le he visto y seguro que reconozcería si era tuya.. jajaj Pero cari, a mi me gustaría saber si tu luego has viajado algo de turista a otros sitios..? Ya sabemos que son un incordio pero bueno, todo el mundo tiene derecho a viajar (por eso no viajo yo, ajajaja). Bezos.

Anónimo dijo...

Me encanta subir a Barcelona y pasearme por las ramblas... y tienes toda la razón del mundo.
Está mutando demasiado, se está Disneylanizando demasiado (buenísima, tu expresión).
No os dejéis, barceloneses, luchad por recuperar vuestro espacio vital :) que no se pierda la magia que envuelve a la ciudad condal...
Un abrazo enorme :)

Dr. en Lisboa dijo...

Y sin embargo, no resulta curioso como muchas veces, el ser de un sitio hace que conozcas poco ese lugar. Yo por ejemplo, hasta hace muy poco, nunca había subido al Miguelete, la torre de la catedral. No sé, suena a tontería, pero mucha gente que conozco de Valencia nunca ha ido a ver los sitios más típicos, sus museos.
Sé que no hablas exactamente de esto en tu post, pero me ha llevado a pensarlo.
Los turistas, en plan horda de orcos de tierra media, tienen sus inconvenientes,..... aunque supongo que, en ocasiones, muchos deberíamos ser más turistas de nuestras propias ciudades!
Un beso, niño shysh!

xerofernandez dijo...

Un saludete del tito xero!

Anónimo dijo...

Je, yo vivo en Canarias, imagínate, es raro no convivir con turistas. El sur de Tenerife se ha convertido en una nueva California, ver a alguien autoctono es de paso... es sentirte extranjero en tu tierra, un horror.

Pero bueno, uno muchas veces también es el turista no?

el Shysh dijo...

A mi me gusta mucho ver turistas en mi ciudad, pero claro son los inconvenientes de vivir en el puro puto centro. Hay hordas de esas que ni siquiera son turistas de Barcelona, vienen de Lloret, de Calella, de Salou, de Dior sabe donde, les dejan los autocares frente al Hard Rock ( Fran, yo nunca visitaria ese sitio)y les recogen un par de horas más tarde. Son deceneas de autobuses en una tarde. Luego tenemos a los italianos de low cost que se alojan en apartamentos, también en mi barrio, gritos, jaleo y botellón en los patios y balcones a todas horas, luego los yanquis de los cruceros, que debe haberlos glamurosos pero esos no van en borregada de pantalón corto y cámara en ristre: Grabalo todo sin mirar nada y luego lo ves en casa tranquilito.
Yaguito, yo soy un turista de lo más individualista, cívico y disidente. Estuvimos en Berlín el verano pasado y no me verías por los lugares comunes. Yo hacer dos horas de cola para subir al Reichstag por mucho que la vista sea stupenda pues como que no. Yo pasearme en borregada, pues como que tampoco. Nos gusta descubrir la esencia de una ciudad y paseando por la Rambla la verdad es que no creo que los guiris se queden con lo mejor, porque solo hay guiris. A mi dame paseos por calles donde esten los nativos y buscame en las terrazas donde haya nativos, en las cervecerias de los nativos. Seré guiri pero no se balar.
Ruvis, Itoitz, Carabiru, Xero,Frans, lalaith, Donuttz: mil besos autóctonos.
Donuttz, te espero en BCN para unas birras, que lo sepas.

Anónimo dijo...

shysh plaerdemavida,..... has ido a dar conmigo.... y con mi hermano! :)

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