2/3/09

BIBLIOT€CAS: A PAGAR!!!!

Me envía Enric un correo en el que se advierte que la SGAE ataca de nuevo en su cruzada por defender los derechos de los autores. Y vuelve a la carga esta vez con su propuesta de que las Bibliotecas paguen un cánon de 20 céntimos por libro prestado. Acompaña el correo un texto de José Luís Sampedro. Léelo y sal corriendo a la Biblioteca. Ah, y si te apetece, pásalo.



POR LA LECTURA

Cuando yo era un muchacho, en la España de 1931, vivía en Aranjuez un Maestro Nacional
llamado D. Justo G. Escudero Lezamit. A punto de jubilarse, acudía a la escuela incluso los sábados por la mañana aunque no tenía clases porque allí, en un despachito que le habían cedido, atendía su biblioteca circulante. Era suya porque la había creado él solo, con libros donados por amigos, instituciones y padres de alumnos. Sus “clientes” éramos jóvenes y adultos, hombres y mujeres a quienes sólo cobraba cincuenta céntimos al mes por prestar a cada cual un libro a la semana. Allí descubrí a Dickens y a Baroja, leí a Salgari y a Karl May.
Muchos años después hice una visita a un bibliotequita de un pueblo madrileño. No parecía haber sido muy frecuentada, pero se había hecho cargo recientemente una joven titulada quien había ideado crear un rincón exclusivo para los niños con un trozo de moqueta para sentarlos. Al principio las madres acogieron la idea con simpatía porque les servía de guardería. Tras recoger a sus hijos en el colegio los dejaban allí un rato mientras terminaban de hacer sus compras, pero cuando regresaban a por ellos, no era raro que los niños, intrigados por el final, pidieran quedarse un ratito más hasta terminar el cuento que estaban leyendo. Durante la espera, las madres curioseaban, cogían algún libro, lo hojeaban y veces también ellas quedaban prendadas. Tiempo después me enteré de que la experiencia había dado sus frutos: algunas lectoras eran mujeres que nunca habían leído antes de que una simple moqueta en manos de una joven bibliotecaria les descubriera otros mundos.
Y aún más años después descubrí otro prodigio en un gran hospital de Valencia. La biblioteca de atención al paciente, con la que mitigan las largas esperas y angustias tanto de familiares como de los propios enfermos fue creada por iniciativa y voluntarismo de una empleada. Con un carrito del supermercado cargado de libros donados, paseándose por las distintas plantas, con largas peregrinaciones y luchas con la administración intentando convencer a burócratas y médicos no siempre abiertos a otras consideraciones, de que el conocimiento y el placer que proporciona la lectura puede contribuir a la curación, al cabo de los años ha logrado dotar al hospital y sus usuarios de una biblioteca con un servicio de préstamos y unas actividades que le han valido, además del prestigio y admiración de cuantos hemos pasado por ahí, un premio del gremio de libreros en reconocimiento a su labor en favor del libro.

Evoco ahora estos tres de entre los muchos ejemplos de tesón bibliotecario, al enterarme de que resurge la amenaza del préstamo de pago. Se pretende obligar a las bibliotecas a pagar 20 céntimos por cada libro prestado en concepto de canon para resarcir –eso dicen- a los autores del desgaste del préstamo. Me quedo confuso y no entiendo nada.
En la vida corriente el que paga una suma es porque:
a) obtiene algo a cambio
b) es objeto de una sanción.
Y yo me pregunto: ¿qué obtiene una biblioteca pública, una vez pagada la adquisición del libro para prestarlo? ¿O es que debe ser multada por cumplir con su misión, que es precisamente ésa, la de prestar libros y fomentar la lectura?
Por otro lado, ¿qué se les desgasta a los autores en la operación? ¿Acaso dejaron de cobrar por el libro vendido? ¿Se les leerá menos por ser lecturas prestadas? ¿Venderán menos o les servirá de publicidad el préstamo como cuando una fábrica regala muestras de sus productos?
Pero, sobre todo: ¿Se quiere fomentar la lectura? ¿Europa prefiere autores más ricos pero menos leídos? No entiendo a esa Europa mercantil.
Personalmente prefiero que me lean y soy yo quien se siente deudor con la labor bibliotecaria en la difusión de mi obra. Sépanlo quienes, sin preguntarme, pretenden defender mis intereses de autor cargándose a las bibliotecas. He firmado en contra de esa medida en diferentes ocasiones y me uno nuevamente a la campaña.
¡NO AL PRÉSTAMO DE PAGO EN BIBLIOTECAS!

José Luis Sampedro

10 comentarios:

Stultifer dijo...

Poco leemos aunque compramos libros. Si ahora hay que pagar por ir a una biblioteca y tomar un libro prestado, cerrarán todas las bibliotecas o se convertirán en simples salas de lectura. La SGAE va loca del potorro.

Thiago dijo...

Hombre esto ya es de locos, pero lo harán. Es como lo de los Museos, no? creo que hay un tipo que dice que conoce a uno que una vez fue a un museo gratis.

ahora cobran y todos pagamos religiosamente...

Bezos.

Liz Marin dijo...

me parece fatal q se tenga tambien q pagar por leer...van a terminar cobrandonos por respirar....


besitosss

Caracola Light dijo...

Sampedro nunca me decepciona. Bravoooo!!!!

Ernesto dijo...

Totalmente en contra de que se pague canon, pero lo que sí que haría sería cobrar un canon por conexión wifi... Las bibiliotecas se están convirtiendo en Megacibercafés. No soporto estar estudiando con alguien al lao mía tecleando... y no precisamente una tesis doctoral!!

Anónimo dijo...

Me quito el sombrero ante José Luis Sampedro, excelente economista, excelente novelista, con un humor fino e irónico y con la cabeza muy bien amueblada a pesar de su edad.

La S.G.A.E. es un "lobby" de LADRONES, su fin único es ganar pasta y más pasta.

Yo pagaría gustoso los 20 céntimos por el préstamo, o 1 EURO (GRATIS para el que no pueda, por supuesto), pero para mejoras en las bibliotecas en cualquier sentido, no para ENGORDAR LAS ARCAS DE UNOS GOLFOS.

Yo también me uno a José Luis Sampedro.

MIGUEL

P.D. Eso es para Ramoncín:

Escucha, mequetrefe que vas de intelectual por la vida, que sepas que me bajé del eMule todas tus canciones, que por supuesto no he escuchado porque no me gustan, lo hice para protestar porque es la única opción que me queda ante vuestro mercantilismo. Ahora vas y me denuncias.

Manuel. dijo...

Totalmente de acuerdo con anapedraza, yo estoy harto ya de la puta Sgae, yo trabajo en una emisora de radio y todos los meses es un pico para esa gentuza, me compro un cd, un pen, cualquier cosa y le estamos dando de comer a toda esa gentuza... estoy fatal con ese tajo de gandules que quieren vivir a costa de los demas, es un punto que Zapatero fallo. Lo siento ,,, gentuza gandula porculeros,, anda ya ..

BIRA dijo...

Ains, por algo siento tanta admiración por Sampedro. Se puede decir más alto, pero no más claro.
A la SGAE se le ha ido la pinza hace tiempo. Adónde quieren llegar? Todas las medidas que pretenden tomar me parecen bastante absurdas, pero esta, si cabe, se lleva la palma.

con tu permiso te copio el post para publicarlo también en mi blog. Cuantos más lo lean mejor. A ver si entre todos podemos poner un poco de cordura a esta panda de "negociantes".

besos.

TH dijo...

Las bibliotecas son aburridas y el olor de sus libros me marea.

He comentado porque tu 'Anda, ya que has llegado hasta aqui, di la tuya' me ha incitado a hacerlo eh?

Javier dijo...

La avaricia de la SGAE carece de límites !!!, me da vergüenza.

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